Cómo venderte como Freelance


Post de Colaboración de Carlos Caballero, socio co-fundador y Director de Spanisland.
Hoy quiero hablaros de lo imprescindible que le resulta a un freelance el ser vendedor. Conozco a muchos profesionales autónomos que me dicen “a mí no me gusta vender”… a lo que yo les respondo, “pues si no te gusta vender tienes dos opciones: una aprender y hacer que te guste o dos dejar de ser freelance y trabajar para otros que te vendan”.
Un buen freelance debe saber vender tanto sus proyectos como a sí mismo; en caso contrario puede ocurrirle que se harte de realizar presupuestos para nada o que encuentre a la larga serios problemas con los clientes. Vender no es sólo convencer a alguien para que nos compre, es mucho más:
  • Marcar premisas en la relación con el cliente.
  • Sentar sistemas de trabajo, calendarios, procesos, etc.
  • Confirmar que el cliente entiende los conceptos y resolver las dudas.
  • Prever posibles problemas antes de que surjan y anticipar las soluciones.
  • Ajustar el presupuesto a las necesidades y posibilidades del cliente.
  • Llegar a compromisos de entrega, de pago y de servicio.
  • En definitiva, crear unos lazos profesionales sólidos que nos permitan una relación a largo plazo.
  • Es muy difícil conseguir un cliente, pero es muy fácil perderlo, así que empecemos de la mejor forma posible.
Muchas veces solemos no decir toda la verdad por miedo a perder un cliente, y ésto, a la larga suele ser muy peligroso. Es importante que el cliente conozca las dificultades de un proyecto, los límites que no se pueden sobrepasar, los plazos de entrega… o incluso los sobre-costes que se pueden generar si, por ejemplo, el cliente se retrasa en la entrega de los materiales.
Por último, una parte muy importante del proceso de venta es la generación de un buen presupuesto, con una fijación de precios adecuada. Muchos autónomos realizan sus presupuestos basándose en un precio/hora, normalmente ajustado en base al mercado, a su competencia, a su experiencia, etc. Este sistema de precios, aunque puede resultar más simple, no siempre es equitativo ni justo para ambas partes, ya que no suele tener en cuenta las reuniones previas, los cambios que el cliente puede solicitar, los retrasos por problemas técnicos (por ejemplo, con archivos no funcionales que el cliente nos entrega)…
Mi recomendación para cualquier freelance es que se formen en aspectos de la venta; pueden acudir a documentación en Internet o a libros sobre el tema. Yo recomiendo ” La Guía Fácil de las Ventas…for Dummies” de Tom Hopkins. Y, como no, aprende de la propia experiencia, observando los errores y los logros que tenemos. Así pues, ¡felices ventas a tod@s!


Articulo original: Cómo venderte como Freelance

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