Consejos para vivir mejor: Google Keep para organizarte

Google Keep es una de esas apps que realmente han mejorado mi vida diaria. Aquí te ofrezco unos consejos para utilizarla mejor, para que puedas sacarle todo el partido.

Google Keep: una bombilla amarilla en tu Android que en la cultura occidental es el símbolo de una genialidad (si tienes un iPhone puedes utilizar TurboNote for Google Keep; para Windows Phone, Google Keep Free). ¿Cuántas veces la has usado? ¿Y para qué?

Acostumbrado al bloc de notas de mi antiguo Android, lo cambié por una nueva versión de esa app y solo lo abría para tomar pocos y esporádicos apuntes, que al final no utilizaba nunca.

Con el tiempo, empecé a utilizar Google Keep cada vez más, hasta que se ha terminado convirtiendo en una aplicación básica en el escritorio de mi smartphone, sin la cual no podría pasar.

Si te gusta ser organizado sin tener que recurrir a sistemas complejos, a ti también te puede parecer muy útil, y hasta imprescindible.

Recuérdamelo cuando me haga falta

El primer motivo por el que empecé a utilizar Google Keep fue la opción de crear recordatorios con alarma. Yo no es que sea una persona especialmente desorganizada; más bien, lo contrario. Pero soy despistado y tengo mala memoria: puedo pasarme horas pensando lo que tengo que hacer al día siguiente y luego olvidárseme todo cuando llega el momento.

Con Google Keep preparo rápidamente una nota con la descripción de lo que tengo que hacer, la abro y, a veces, añado también un título. Después pongo la alarma en la parte inferior de la nota, a la hora que me hace falta, y ya no me estreso por tener que acordarme.

Si cuando salta la alarma no puedo hacer lo que me había propuesto y lo puedo dejar para más tarde, restituyo la alarma y ya está, así no se me olvida.

Se acabaron las listas en papel, ya solo digitales

¡Basta de tirar papel! No siempre es posible, pero, siempre que se pueda, deberíamos ahorrar papel y no utilizarlo para motivos innecesarios. Sobre todo cuando la tecnología puede remplazar el papel y el lápiz de forma excelente, incluso mejor.

Es el caso de las listas de Google Keep. ¿Tú no haces listas de la compra o de cosas que tienes que hacer? Yo tampoco, hasta hace poco, pero cuando descubrí que no hace falta más que sacar el móvil del bolsillo y abrir una aplicación, me olvidé del papel y de la pizarra en el frigorífico donde ponía las cosas que comprar.

Con Google Keep abro una nota con un título, por ejemplo, "Lista de la compra", y empiezo a apuntar lo que tengo que comprar. Cuando estoy en el supermercado, cada vez que meto un artículo en el carro, lo marco de la lista: se cierra automáticamente y se mueve al final de la checklist, así puedo ver de un solo vistazo lo que me queda por coger.

El mismo concepto lo aplico también a las famosas to-do-list (las listas de cosas que hacer). Casi siempre llevo una en mi aplicación, así cuando tengo tiempo, me acuerdo de hacer las cosas que tengo pendientes y que tengo que hacer. También en este caso, cada vez que hago algo que me habría propuesto, lo marco en la lista.

Foto y texto, la combinación perfecta

Hasta hace algunos meses nunca había aprovechado realmente la opción de añadir fotos a las notas de Google Keep. En la presentaciónd de la aplicación en Google Play había visto notas de colores y con imágenes, como la foto de una comida, pero nunca se me había ocurrido qué utilidad podía tener.

Empecé a utilizarla cuando tuve que comprar los muebles de la casa. Empecé hojeando catálogos en línea y guardando los artículos que me interesaban con Pocket. Me iba por las tiendas a ver los muebles, pero al salir de la primera ya no me enteraba: empezaba a mezclar sillones, precios, colores y otros modelos en una maraña variopinta de objetos y euros.

En la segunda visita me organicé con Google Keep y empecé a recoger todo en una nota: en el título ponía el nombre de la tienda, en la lista señalaba el modelo, las dimensiones y el precio del mueble, y después le sacaba una foto, para poder reconocerlo rápidamente.

Notas dispersas que siempre son útiles

La volatilidad de las palabras y mi mala memoria hacen que las notas de Google Keep tengán un valor aún mayor, sobre todo para las notas dispersas tomadas al vuelo. Con ellas hago un diario de apuntes sueltos y un clasificador de pensamientos.

Mientras estaba corriendo junto al vasto mar, me vino una de esas genialidades que se te ocurren solo cuando tienes la mente libre y despreocupada, la solución a un problema al que le había estado dando vueltas desde hacía tiempo.

Conociéndome, habría sido imposible acordarme: en lo que llegaba a casa se habría convertido en un momento insignificante borrado de la memoria. Por suerte, cuando salgo a correr siempre me llevo el móvil, para llevar la cuenta de los kilómetros recorridos y el tiempo empleado con aplicaciones como Runtastic.

Como no podía interrumpir la carrera y perder tiempo escribiendo lo que se me había ocurrido, saqué el smarthpone y creé una nota de voz dentro de Google Keep.

Google Keep también me resulta útil en las conversaciones con amigos, cada vez que salen temas clásicos como películas y series, música, libros, lugares que visitar y otras cosas. Si a ti también se te olvidan para cuando quieres llegar a casa y nunca sabes dónde apuntarlos, esta aplicación de Google es una buena solución.

Notas dispersas y accesibles, ¡pero ordenadas!

Google Keep dispone de un widget que puedes colocar en el escritorio del Android, para que puedas tener siempre controladas las notas; una función cómoda si le das mucho uso. Además, existe una aplicación web para acceder a las mismas notas del móvil desde un ordenador, para tenerlas siempre disponibles.
Pero hay una cosa clara: para encontrar notas y listas hay que tenerlas en orden.
Desde el móvil, basta con deslizar la nota hacia la izquierda o derecha para archivarla. Las notas se guardarán y podrás seguir accediendo a ellas, pero no te van a estorbar con los contenidos más actuales. Aunque si estás seguro de que ya no vas a necesitar más la nota, mejor eliminarla directamente, así tampoco ocupa espacio a lo tonto.

Otro consejo útil es ponerle distintos colores a las notas para crear un impacto visual más inmediato y para que la propia aplicación se más atractiva.

Un mínimo de organización nos hace más felices

Incluso a quienes no les gusta tener la vida encajonada y completamente organizada, reconocerán que tener un mínimo de programación es necesario para vivir más tranquilo. Entre acordarse de pagar un recibo y llevar la cuenta de quién ha pagado el campo de futbito hay una infinidad de cositas de las que nos tenemos que acordar todos los días.

Google Keep me ha ayudado a llevar recuento de todo esto y a olvidarme de menos cosas. Inspirándote en cómo lo uso yo, tú también puedes sacarle provecho y empezar a vivir mejor. 


Fuente: Consejos para vivir mejor: Google Keep para organizarte

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